Saber qué es un gato dominante y cómo lidiar con él es de suma importancia para controlar la agresividad en nuestros gatos. Aquí te dejamos nuestras recetas para un ambiente multi-gato más armónico.
¿Qué es un gato dominante?
Según las investigaciones, los gatos generalmente no siguen una jerarquía social estricta, no viven en una estructura de manada cerrada como la de los lobos; ya que no tienen la necesidad de cooperar y vivir con otros gatos para sobrevivir.
Los gatos domésticos son animales independientes y territoriales esto no quiere decir que no formen algún tipo de relación cercana entre ellos.
Cuando muchos gatos viven en un espacio pequeño, es normal que se dé una estructura de dominación flexible.
Desde este punto de vista, no existe el gato”alfa” o el “jefe” que está a cargo del grupo,como tendemos a pensar .Un gato no nace dominante,ni lo es de forma natural. Puede tener una tendencia a ser dominante como rasgo de personalidad. Pero este rol puede cambiar en función del contexto.
Lo que existe es un gato con:
Actitud dominante , donde muchos de esos comportamientos tienen que ver con ciertas motivaciones como controlar el territorio, protegerlo o mantenerse a la defensiva por alguna situación que el gato considera una amenaza ( cierto grado de estrés).
Personalidad dominante:diferencias individuales consistentes en patrones de comportamiento. Tendrá tendencia a mostrarse como el felino de más estatus cuando se sienta amenazado por otro gato.No se trata de un rol fijo, una vez que el conflicto se resuelva el gato se mostrará tranquilo y pacífico.
Falta de socialización: algunos gatitos no tuvieron la posibilidad de jugar con sus hermanos de camada u otros gatos, o tuvieron que pelear con otros gatitos por su comida o bien se trata de un cachorro que se alimentó con biberón, criado sin otra compañía que la del humano. Al crecer, algunos de ellos no tendrán internalizado cómo interactuar con otros gatos y se mostrarán agresivos, bajo ciertas circunstancias.
Un gato puede presentar un comportamiento dominante por:
Territorio: se produce un conflicto por la llegada de un nuevo integrante, o por celos, ya que alguno de los gatos recibe más atención o pueden mostrarse territoriales por algún espacio específico de la casa, por ejemplo un sillón, la cama o el área de comida.
Agresión de macho a macho: sobre todo en época de apareamiento.
Agresión basada en el miedo: se refiere a cualquier situación en la que el felino se sienta amenazado, por ejemplo un gato puede mostrar su dominio cuando otro lo acorrala con la intención de atacar, entonces en vez de mostrarse sumiso lo desafía encarando al agresor.
Entonces un gato dominante es:
El felino que adopta una actitud dominante cuando se siente amenazado en alguna situación específica y reacciona de manera desafiante dispuesto a pelear con su adversario.
Por otro lado, tenemos el gato de personalidad dominante, es el gato de mayor estatus que reacciona frente a un conflicto de amenaza o de territorio. Él adopta este rol en su entorno habitual, pero esto no siempre será así, ya que puede pasar a ocupar una posición más baja en la jerarquía, si se produce algún cambio,por ejemplo un problema de salud o la llegada de un integrante al grupo.
En ambos casos , en cuanto el contrincante se muestra sumiso el conflicto se soluciona y la tranquilidad vuelve al grupo.
¿Cómo identificar un gato en actitud dominante?
Si dos o más gatos se agreden de manera sistemática y con frecuencia en diferentes contextos, estamos frente a una actitud agresiva de alguno de ellos. El felino agresivo se reconoce porque siempre tiende a pelear y a amenazar al resto. Por lo tanto, no se trata de dominancia, ya que el gato dominante solo intenta mostrar su superioridad y marca su territorio peleando solo si es necesario. La mayor parte de las veces estos enfrentamientos se resuelven cuando uno de los gatos se muestra sumiso.
Algunas señales para reconocer actitud de dominancia
- Hacer movimientos rápidos con la cola
- Rociar la zona con orina
- Mirada fija al otro gato
- Postura corporal de tensión
- Emitir alguna señal de amenaza como gruñido o mostrar los dientes
- Pelos erizados
- Frotar cabeza y cola contra el objeto
¿Cómo lidiar con un gato dominante en casa?
La conducta de un gato dominante no debe ser castigada porque:
- es una forma de comunicación de la especie
- el castigo sólo generará estrés y no solucionará el problema.
Pero sí, se debe trabajar el comportamiento dominante de un gato si está afectando la capacidad de otro gato para acceder a la comida, agua, al afecto y a diferentes áreas de la casa.
Considerar que los comportamientos asociados al rasgo dominante, no se manifiestan de manera continúa, solo se presentan cuando aparece en escena algún recurso que a todos los gatos les interesa.
Para lidiar con esta situación debemos poner atención en qué es lo que motiva los conflictos entre nuestros gatos y modificar el entorno en el que viven y adaptarlo a sus necesidades de manera que ninguno de ellos tenga que entrar en conflicto.
Se recomienda:
- Mantener el número suficiente de areneros, de tazones de comida, de rascadores, de juguetes, de camas o lugares de descanso, para evitar conflictos entre ellos.
- Alimentar a los gatos todos a la vez en platos individuales y a cierta distancia, para evitar que se peleen por la comida.
- Proporcionar camas suficientes para que los gatos descansen, también lugares donde esconderse si se sienten amenazados o muebles de altura para trepar
- Al introducir un nuevo integrante al grupo, hacerlo de manera paulatina; mantenerlos separados al comienzo y dejar que de a poco se vayan conociendo( que se vean a través de una ventana, por ejem.).
Es importante que antes de etiquetar a un gato de dominante o agresivo se debe analizar las situaciones que generan comportamientos conflictivos , y con respecto a estos esto quisiera compartir una situación personal que me tocó vivir:
Hace alrededor de 1 año y medio llegó a mi casa un gatito de unos 8 meses al que comencé a alimentar en el jardín, ya que tengo 7 gatitos en casa. Él se mostraba muy asustado y se alejaba al verme, de a poco comenzó a tener confianza, hasta que logré acariciarlo. Un día me percaté que estaba un poco barrigón y recién me di cuenta que era una gatita y estaba preñada.
Tuvo a sus gatitos días después en un sitio abandonado, pero luego llegó a nuestra casa con su cargamento de bebés.
Arreglé una camita para ella en un ropero y automáticamente quedó con dos piezas para ella sola y sus cachorritos.
Los bebés crecieron y pronto comenzaron a salir al patio, allí se iniciaron nuestros problemas porque esta gatita, que ahora se llama Cleo, agredía a cualquiera de los gatos de la casa que se acercarán al patio. Los perseguía con fiereza , provocando mucho estrés a la familia humana y a la felina.
Era una actitud normal considerando que ella se crió en la calle y se tuvo que defender de otros gatos y de más de algún perro para poder sobrevivir. Ahora se sentía amenazada por la presencia de los gatos de las casa
Logramos regalar todos los gatitos, pero Cleo no lograba adaptarse a su nueva familia felina y continuaban los ataques furiosos contra ellos.
Como aún era invierno la encerramos en las dos piezas en las que crió a sus bebés durante la noche, lo que la tranquilizaba bastante.
Pero comenzó a aumentar la temperatura y Cleo comenzó a dormir afuera, aún dando muestras de su agresividad.
Como en las tardes refrescaba un poco le habilité una camita abrigada en altura y le indiqué que ahí debía dormir.
Fue así como Cleo comenzó a bajar su agresividad lentamente y nos dimos cuenta que no se trataba de un gato dominante ni de un gato agresivo, simplemente ella llegó a una casa donde no tenía territorio propio y estaba intentando pelear para conseguirlo.
Ahora duerme en la noche y descansa en el día en su espacio. Entra a la casa y comparte pacíficamente los sillones, los muebles en altura o la cama nuestra sin conflicto
Llegamos a una solución sin querer, nunca nos preguntamos qué originaba los ataques de furia de la gatita.
Es importante observar el comportamiento de nuestros gatos , no sólo para detectar si alguno de ellos se encuentra en el rol de gato dominante, sino también para descubrir algún cambio en su comportamiento que nos indique algún problema de salud.
Además la observación nos permitirá diferenciar cuando alguno de los felinos está actuando como gato dominante y cuando sólo se trata de un juego. Si bien es cierto que jugando más de alguno puede recibir un rasguño, cuando se trata de gato dominante lo podemos reconocer porque presenta un desafío físico.
Referencias:
https://www.thespruce.com/discourage-feral-cats-386479
https://www.alleycat.org/resources/how-to-live-with-cats-in-your-neighborhood/
https://petkeen.com/how-to-keep-stray-cats-away-from-your-house/
https://sunshineandplay.com/how-to-keep-stray-cats-off-your-porch/